Que sí, que ya han llegado los fríos, y no sé a vosotros pero a mí al final me ha pillado desprevenida.
Llevaba desde antes de Navidad tejiendo un gorro para mi sobrina, y mira que sabía que lo estaba aparcando, pero ni caso, ha tenido que helar para que me decidiera a terminarlo. Había pensado en hacerle uno de esos que tienen caritas de animales, pero al final me he venido abajo y he optado por algo más clásico.
La calidad empleada ha sido la Nepal, y los colores rosado polvo y blanco (los dos en venta en la tienda, que todo hay que decirlo).
El gorro, es muy sencillo, tejido en espiral con puntos bajos. Para darle un poco de gracia he añadido una flor.
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Para el cuello he utilizado el punto arroz (Moss Stich), una vuelta en blanco y otra en rosa.
Aún faltan los remates, pero ya se puede ver el resultado...
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