Ya sé que lo he comentado en otro post y me vais a perdonar, pero es que el mercado tiene los días contados. Me gusta llegar al Chico camino de la tienda y encontrarme los puestos de flores. A algunos floristas ya les quedan pocas cosas (bien por ellos) y no luce tan bonito como otros días pero aún así tiñen el centro de un color especial. El lunes volverá la rutina de la plaza y, según dicen, también el frío. Comienza la cuenta atrás para la Navidad ....